Redacción.
Fernando Miranda, inspector provincial de la Inspectoría María Auxiliadora, ha presidido una solemne eucaristía en honor de San Juan Bosco, con motivo de su fiesta. La celebración tuvo lugar en la cripta del Tibidabo este pasado sábado por la tarde. Toda la comunidad salesiana participó en la concelebración, que reunió a medio centenar de fieles entre parroquianos y amigos de la obra.
Durante su homilía, Fernando Miranda recordó que San Juan Bosco, fundador de los salesianos, había sido declarado “padre y maestro de la juventud” por el papa san Juan Pablo II en 1988, centenario de la muerte del santo.
El inspector glosó también el famoso “sueño de los 9 años”, del que se cumplen ahora doscientos años. A partir de ese sueño programático y vocacional de Don Bosco, Miranda recordó las características de la pedagogía salesiana: la amabilidad, la cercanía, los buenos modales y el contar con la ayuda del Señor y María Auxiliadora, aunque parezca que las fuerzas no alcancen; así lo vivió el santo de Turín durante toda su vida sacerdotal y lo expresó con emoción al final de su vida: “A su tiempo lo comprenderás todo”.
La celebración fue solemnizada por los cantos de la asamblea, acompañados por los acordes del órgano de la cripta, recientemente restaurado tras más de dos años de trabajo.