Crónica de Josep Lluís Burguera.

Casi seiscientos jóvenes han visitado el santuario del Tibidabo el último día de julio, como parte destacada del itinerario por la Barcelona salesiana, en el segundo día del Campobosco 2024 (#CPB24).

Después de pasar la noche en Martí Codolar, el gran grupo se dividió en dos y la primera expedición alcanzó la cima de la sierra de Collserola a media mañana. Con la llegada los jóvenes, el bullicio salesiano se adueñó por momentos de la plaza y de las escalinatas de la basílica del Tibidabo.

La comunidad salesiana local recibió con alegría a los participantes y a los salesianos y animadores que los acompañaban a los jóvenes en su visita. Además de disfrutar de las espectaculares vistas de la ciudad, los jóvenes visitaron la cripta con la capilla de Adoración al Santísimo Sacramento y también la basílica superior; desde allí subieron por las escaleras hasta los pies de la enorme imagen del Sagrado Corazón de Jesús. Por la tarde, siempre bajo un sol de justicia, el segundo grupo realizó el mismo recorrido y al final, todos se prodigaron en fotos en la escalinata del templo para inmortalizar el momento.

Los jóvenes del Campobosco también recorrieron otros lugares salesianos de Barcelona, como Martí Codolar, en donde se realizó la famosa fotografía de Don Bosco rodeado de jóvenes; Can Prats, casa en la que San Juan Bosco tuvo el sueño misionero de la joven Congregación Salesiana durante su visita de 1886; la parroquia de María Auxiliadora de Salesianos Sarrià; y la cercana Torre Gironella, presencia de las Salesianas en Barcelona, gracias a la intercesión de Doña Dorotea de Chopitea.

Por la noche, de nuevo en Martí Codolar, el Campobosco participó en la concelebración eucarística presidida por el inspector provincial Fernando Miranda y se retiró pronto a descansar para emprender el largo viaje a Turín en la madrugada del primero de agosto.